Una empresa joven

Somos una empresa joven, comprometida con la creación de un producto de altísima calidad, logrado a partir del fruto del olivo, árbol inseparable del terruño mendocino.

El aceite de oliva representa en numerosos pasajes bíblicos la alianza de Dios con su pueblo, nuestro objetivo es revalorizar este producto milenario y místico por sus propiedades nutricionales y terapéuticas.

María Ravida es una emprendedora mendocina, creadora del proyecto heredó por sus raíces italianas la pasión por el buen aceite de oliva virgen extra y el respeto por la tradición. Hay una increíble conexión y similitud entre sus aceites y su impronta personal. Tranquilidad, tenacidad, simpleza, persistencia, superación y un gran amor por la olivicultura son las mismas características que se encuentran cuando se habla con ella y se mira la etiqueta de sus aceites.

La paloma con una rama de olivo en el pico después del diluvio simboliza el volver a empezar, reflejando así un momento especial de su vida donde necesitó de toda su fuerza interna para seguir adelante. Lo hizo con tanto éxito que hoy en día es referente de la Olivicultura Argentina, y una hacedora de Aceites Vírgenes Extra de excelentísima calidad.